05 noviembre 2013

ANALISIS: STANLEY PARABLE



Es una moda curiosa esto de los "Nu Videogames". Cuando crees ya estar seguro de lo que es un videojuego, de hayar las "sutiles" diferencias entre To The moon y Call of Duty, cuando hemos llegado a la conclusión que los juegos de Cage son peliculas y no videojuegos, cuando al fin hemos captado la sutil indirecta de ser engañados por TWD, llega un nuevo videojuego/experimento que rompe con los estandares y nos recuerda que aun tenemos la capacidad de la sorpresa, aun cuando sus bases se alejen gradualmente del titulo "Videojuego", llega un punto inexplicable donde el valle inquietante cinefilo se desvanece y te sientes un jugador nuevamente, donde tus elecciones cambian la historia y no estas ante un guion pre establecido...

Ese experimento, ese truco de tus principios, eso es la historia de Stanley... ¿Funciona?, Adentro la respuesta.


Siendo sinceros, nunca probé el mod de Half life 2 original, Stanley Parable era una aventura gráfica totalmente nueva para mi, un juego que parecía tener poco o nada de juego, un experimento que tal vez merecía la pena probar, con un amplia gama de finales prometidos, tenia toda la apariencia de ir por buen cauce, sobre todo al momento de venderme mi "Libertad", ese termino trillado que nos han querido vender en todas partes y nadie logra poder sintetizarlo en una píldora o en un videjuego y... Stanley Parable no es la excepción, de hecho, este experimento se burla de esa libertad, se burla de los videojuegos, se burla del imbécil que esta detrás de la pantalla haciendo todo lo posible para tener suficiente autonomía y... bueno, la tienes, en parte (como todo) El narrador es el "Gran Hermano" que Orwell soñó las noches de verano, ese ojo que todo lo ve y que te tiene en un laberíntico sistema de ensayo y error, un experimento social/humano/filosofico donde una voz gigante lo controla todo; El narrador es nuestra mente, descrita como la falsa Libertad que queremos creer pero que estamos predestinados a llevar a cabo (la libertad real es una ilusión), el recurso filosófico perfecto, un punto álgido en los videojuegos que abordan el existencialismo como herramienta, una perfecta herramienta voluble a cambios e interpretaciones, un personaje que puede llevarse premio en los VGA, un secundario o un protagonista o ambas a la vez...

Un sin sentido funcional y profundo

El escenario es cambiante, dependiendo de los gustos y designios del jugador y, por ende, las reacciones del gran hermano/yo mismo que todo lo ve, es decir, el escenario "cambia" según nuestras elecciones reflejadas en la actitud del narrador, en el cambio brusco de planes, en desconectar un telefono que parecia solo estar creado para ser descolgado. En una fase del juego tenemos que tomar una elección que haría sufrir un derrame cerebral a cualquier RPG termino medo BIOWARE/EA de hoy en día: La puerta izquierda o la puerta derecha, ¿Difícil predicamento, no? El narrador nos empuja a tomar la puerta de la izquierda y, en ese instante, la cuarta barrera se rompe por un momento, el jugador es empujado a ir a la derecha (por que todos somos unos rebeldes cuando nos dan a escoger) y allí el camino se divide en pequeñas sub decisiones que pueden llevarte a uno u otro de los finales que tienes a disposición... ¿Suena muy bien no?

¿Hasta que punto es sano para un argumento dotar al jugador de tantas decisiones? Esa es la parábola de Stanley.

Para entender Este experimento dinámico de decisiones y libre albeldrio, debemos tener en cuenta la premisa que damos por dada en los videojuegos: Libertad = Mas caminos, mas puertas, mas finales. Stanley Parable nos enfrenta a esa incomoda realidad fascista de la industria y nos coloca en una oficina, donde simplemente debemos seguir la voz de nuestro narrador, como un lector con un perfecto ingles britanico que narra nuestra aventura y que... ¿Nos da ordenes? Bueno, toda el departamento de oficinas esta vacio y caminamos buscando vida, después de 8 horas de pulsar botones... Dos puertas, dos escaleras, ¿Pasillo o elevador?, decisiones decisiones decisiones...

Que no terminan bien siempre



Hace mucho tiempo pongo en duda la libertad en los videojuegos, ¿Necesitamos libertad? Si, la necesitamos, pero ¿A que costo?. En The Walking dead creemos tenerla hasta el final y aun así, es una correa la que te ata al destino; En Fallout NV tenemos cierta libertad pero regida por patrones tecnológicos, vamos, la libertad en los videojuegos nunca va a ser posible. Sin embargo, The Stanley Parable en muchos finales te hace creer que tienes libertad, es decir, si le das la espalda al guion se desenvuelven acontecimientos que dan pie a otro juego totalmente distinto, muy bien, el problema es cuando sacrificamos lógica y narrativa para darle sentido a la libertad.

Me explico.

Cuando yo elijo ir por la puerta de la derecha, aun cuando se me condiciono tomar la izquierda, espero que mis decisiones tengan trasfondo y si, Stanley Parable te lo da, un cambio de aire totalmente nuevo en muchas fases del juego, pero es un desastre, un desastre con letras mayusculas en, por lo menos, la mitad de los finales que nos otorga, tienen un dialogo sin sentido y una consecución ilógica, realmente estupida y que manda al carajo todo intento por solucionar el Puzzle de la libertad que quiere darnos a entender en un comienzo. Poniéndonos en un dialogo sumamente aburrido (pues no tiene concordancia con el contexto) y monótono que llego a durar 10 MINUTOS, escuchando un sin fin de explicaciones sin sentido, logica o realidad por parte del narrador, ¿Que clase de videojuego que "busca" criticar la libertad y dotar su titulo de una hace eso?.

No podemos sacrificar guion y narrativa por un par de puertas y efectos tontos, hecho por el cual la critica ACLAMO Stanley Parable, hecho por el cual los youtubers se lanzan sobre el, dándole el calificativo de "juego de culto" y "verdadera libertad de elección". No digo que Stanley Parable no innove, no intente ofrecernos una nueva visión de lo que es la libertad en los videojuegos, claro que no pues Stanley Parable parodia y se burla de la libertad que nos brindan los demás videojuegos.

Pero o el juego se parodia a si mismo o simplemente se queda corto de ideas.

¿La falta de narrador es la victoria de la libertad?

¿Por que la parábola de Stanley fracasa? Por intentar dotar de "sesiones cortas y divertidas" un guion profundo convertido en trozos sin cohesión, con 5-10 minutos por partida el jugador no alcanza a digerir un guion tomado por los pelos y narrado con velocidad y prepotencia, donde muchos finales son tan superficiales que te dejan realmente predispuesto a los demás. Y no, no me pueden venir a decir que Stanley es una "parábola" repetitiva y contradictoria, ok, esta bien, pero no podemos esperar vender un titulo con un numero significativo de finales sin sentido y donde el jugador NO PUEDE siquiera reflexionar que significa cada final. Stanley Parable tenia las papeletas para lograr dejar un mensaje aun mas profundo en el jugador con cada final (si no, que se lo pregunten a Dear Easther o a Amnesia 2) Pero lo logra de manera intermitente y de manera muy enrevesada.

Sin embargo, no generalizo los finales, muchos están bien logrados y dan ese mensaje subliminal característico de nuestro tedioso personaje que lleva una vida atado a la voz profunda y sensacional del narrador; otros son simplemente surreales (y no quieren ser algo logico) y te sacaran una sonrisa y una risotada despreocupada; otros por su parte, te mostraran una realidad desternillante de la psiquis humana, una parábola filosófica acojonante que te dejara pensativo las siguientes dos partidas y te hará revaluar tus principios. A esos finales les agradezco, pues dan demasiado juego a este experimento que eso debería ser, humor y sátira pero con un contexto claro y sin diluirse en hilaridad innecesaria.

Pero Stanley no me convence, por momentos brilla con genialidad y por muchos otros se apaga en la sensación del vacío y del desespero de la monotonía sin sentido. Me gustaría especular (a riesgo de sonar pedante) que Stanley Parable sufrió su condición de mod Standalone de una aventura gráfica y se quedo sin ideas demasiado temprano, dotando el juego de demasiadas elecciones con finales catastróficos y tontos; otros los recuerdo por su impactante puesta en escena y su cohesión lógica con una filosofía existencialista/nihilista brutal. Pero el juego lo recuerdo como un "Nu juego", como un experimento que se quedo a medio camino (y empezó muy bien) en tratar de explicarme y satirizar la "Libertad" en nuestro medio. ¿Lo recomiendo? Stanley Parable es un videojuego que dependerá de tus gustos, personalmente es un BUEN experimento,  muy sobre valorado y con demasiados errores imperdonables, pero recomendable en cuanto baje de precio por ese arraigo de atraer al jugador al misterio y la rejugabilidad, aun cuando sus finales no sean de mi agrado, estoy seguro que la pasareis bien llevando la contraria al MAGNIFICO PERSONAJE que es el narrador. Es un juego para un publico diverso y esta es mi opinión personal.

Nota: 7

2 comentarios:

  1. esta claro que no entendiste el juego, el verdadero mensaje es no hay salida en nada siempre estaras bajo las ordenes de alguien, un lugar leí que no es un juego es mas una reflexión de la vida de todo, siempre nos darán ordenes y siempre las seguiremos. tu error cae en que de principio esperabas algo y al no encontrar lo que querias no te gusto pero realmente no te tomaste el tiempo de razonarlo el juego te lo muestran como una satira ironica al principio pero no es ironia ni satira es realidad es un ejemplo de como vivimos planteando nuestra libertad bajo un yugo de leyes que nos dicen hasta donde somos libres por ejemplo.

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    1. Entendí perfectamente la sátira y de hecho, en la primeras horas de juego la aplaudí, el problema con este titulo es que busca venderse como un "titulo con varios finales" (no esperaba yo cosa distinta) y esa bonita sátira inicial hacia la vida y la manipulación del patriarcado y el gobierno sobre el hombre se difumina y pierde todo sentido de ser, donde inicialemente habian buenas ideas, explicadas y moralmente contrapuestas hay al final una sarta insufrible de bromas estúpidas y realmente insoportables que no debieron aparecer. A pesar de eso me parece un buen titulo con buenas ideas, pero la experiencia moral y satírica que comenzó bien, naufraga por su peso en un sin sentido de vueltas en círculos y bromas sin gracia.

      Gracias por comentar!

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